martes, 15 de diciembre de 2009

Cuidado de la bicicleta: Graduación de la suspensión

Por Francis A. Castellanos

Por lo regular éste es un tema al que pocos le prestan atención o no se le da importancia, pero lo cierto es que tener una suspensión bien configurada como mínimo nos proporcionará un rodaje más cómodo y en el mayor de los casos, hasta salvarnos de una caída como me ha pasado a mí.


Para comenzar, el primer paso a tener en cuenta es que LA SUSPENSION ESTA AHÍ PARA FACILITARNOS LA VIDA, no para nosotros facilitársela a ella. Esto quiere decir que no es que usted abuse de ella (porque la va a dañar), sino que no le tenga pena. Ella está ahí para hacer un trabajo.

Esto lo menciono porque he visto gente andar en su bicicleta con una suspensión tan dura, que imagino al final deben terminar con las manos todas acalambradas y sin saber porqué.

En estos días tuve la “oportunidad” de rodar en la bicicleta de un amigo cuya suspensión tuvo problemas con los sellos y estaba “trancada” totalmente. Ni un milímetro de recorrido. En una intenté pasar por un policía acostado (pero de esos que rompen puntas de eje) sin frenar, como buscando que del golpe soltara… que va. Casi me rompo una muñeca del golpe que me di. Sin contar que casi me caigo.

Ahí fue donde me di cuenta del gran trabajo que realizan las suspensiones por uno.

El primer punto que debemos tener en cuenta es que la suspensión esté seteada de acuerdo a nuestro peso. Eso es muy importante y es como un traje a la medida. Significando que la configuración que A MI me da resultado, no necesariamente le funcionará a alguien de mayor peso y viceversa.

Una suspensión bien calibrada para el peso del ciclista deberá comprimirse aproximadamente de 20 a 30% de su recorrido solo con el peso del ciclista. De manera que si nuestra suspensión es de 100mm, con el sólo hecho de montarnos, debe comprimirse algunos 2-3cms aproximadamente.

Por que? Fácil: haciendo eso aseguramos que cualquier irregularidad menor hacia abajo, la rueda seguirá el suelo, en lugar de quedar en el aire momentáneamente. Esto no sólo repercute en un rodaje más cómodo, sino que se tiene más control pues la rueda estará más tiempo en contacto con el suelo. A este recorrido lo llamamos sag.

Cómo logramos un sag adecuado? agregándole o quitándole aire a la suspensión (en el caso de las que son de aire) o girando el botón que dice “preload” en la parte superior de la corona de la suspensión. Entendiendo que a más presión (en las de aire) o más “preload” en las de resorte, las endurecerá, permitiendo menos compresión.

Lamentablemente las suspensiones de resorte tienen menos posibilidad de ajuste que las de aire (sin contar que son más pesadas) por lo que nos enfocaremos más en las de aire: para usted tener una idea de qué presión debe tener su suspensión, debe referirse a una pequeña tabla que usualmente tienen en el lado izquierdo (derecho si la miramos de frente).

Si su suspensión es de una sola toma de aire, tal como las Fox, Marzocchi y las Rock Shox Tora y Recon, simplemente agregue o saque la cantidad de aire necesaria de acuerdo a la presión recomendada por el fabricante según su peso. Con eso garantizará una suspensión que no será ni demasiado dura ni demasiado blanda para su peso. La toma de aire está en la parte superior del brazo izquierdo.

Una vez tengamos la presión adecuada, procederemos a graduar el rebote. Ese botón en la parte inferior del brazo derecho (izquierdo si la miramos de frente). En las suspensiones Rock Shox nos presenta un dibujito con una tortuga y una liebre, entendiendo que girando hacia el lado de la liebre, tendremos un rebote más rápido y hacia la tortuga, un rebote más lento.

En las suspensiones Fox, el cierre se gradúa girando el anillo azul en la parte superior del brazo derecho mientras que el rebote se hace con el botón rojo. En la parte inferior derecha encontramos el botón de “blow off”, que vendría siendo lo mismo que el “floodgate” de Rock Shox.

El truco está en encontrar un punto intermedio donde la suspensión no rebote demasiado rápido porque si la dejamos que rebote libremente tendrá una respuesta muy brusca y en algunas ocasiones eso podría no ser lo ideal porque nos “lanzaría” de la bicicleta. Si es el caso contrario, dependiendo del camino, la suspensión podría no tener tiempo de reponerse del golpe y seguirá comprimiéndose mientras el camino sea malo hasta no tener recorrido para amortiguar.

Ya hasta este punto logramos una suspensión que da la cantidad de amortiguación adecuada para su usuario.

Si su suspensión tiene cierre o “lockout” (para hacer que no amortigüe y se vuelva rígida), ese es un recurso por lo regular subutilizado y explico la razón: dependiendo del terreno en el cual vayamos a transitar, usted podría no necesitar de una amortiguación blanda. Léase, en calles pavimentadas o en momentos en que quiera hacer un sprint en una carrera. En ese caso, si la amortiguación es suave, podría restarnos rendimiento.

En ese caso simplemente cerramos la suspensión para que amortigüe lo menos posible o simplemente no amortigüe nada, según su preferencia. Las rock Shox aún después de cerradas, permiten algunos milímetros de recorrido para que la rueda pueda tener un mejor contacto con el suelo.


Dual Air

Es una tecnología que encontramos en las suspensiones tope de Rock Shox. La teoría de este mecanismo es definir a gusto del usuario, qué tan sensible es la suspensión ante las pequeñas irregularidades del camino. Dicho de otra forma: agregando aire a la cámara negativa (parte inferior brazo izquierdo) definimos que tan activa es la suspensión. Si la presión es igual al de la cámara positiva tendremos una sensibilidad promedio. Si es menor que la de arriba, tendremos menos sensibilidad mientras que por el contrario, si debajo tenemos más presión, la suspensión será más sensible durante los primeros centímetros de su recorrido, haciéndola más cómoda y suave.

Para setear este tipo de suspensión se comienza cargando la cámara positiva primero. Si quiere puede sacar el aire a ambas y comenzar desde 0.


El Poploc y el Pushloc

De ésta forma llama Rock Shox a sus mecanismos de cierre remoto. Se trata de la palanquita situada al lado de los shifters en el timón. La misión de la misma es tener acceso al cierre de la suspensión sin quitar las manos del timón en un momento en que pudiera ser crucial. Hay quienes prefieren el cierre convencional (el que no es remoto, se gira el botón azul en la parte superior de la corona en el lado derecho) por pesar menos y por requerir menos mantenimiento.


Consejos

• Es importante mantener limpios y engrasados los tubos de la suspensión. Eso asegura no sólo que no entrará sucio al mecanismo interno de la misma sino que ésta tendrá un funcionamiento más suave.

• Se puede usar aceite regular de la cadena para lubricar esos tubos; se le echa unas cuantas gotas, se bombea la suspensión un par de veces y se limpia el residuo.

• Nunca lavar a presión: si el agua penetra, puede afectar el rendimiento.

• Aunque las suspensiones de aire se cargan por válvulas schrader (mejor conocidas como “anchas”) similares a las que se usan en los tubos paras gomas, NO se utiliza la misma bomba que en las ruedas. La razón es que las cámaras de aire de la suspensión son mucho más pequeñas y las presiones a las que se cargan, son muy superiores a las usadas en una goma. Por lo que una bomba convencional daría mucho más volumen de aire del necesario, pero no la presión requerida para el funcionamiento ideal de la suspensión.

• Las suspensiones con acceso remoto tienen un pequeño botón encima del dial azul llamado “floodgate”. La función del mismo es controlar que tan rígida se vuelve la suspensión una vez se ha cerrado remotamente con el poploc/pushloc. El uso que yo personalmente le doy es el siguiente:


1) Cierro la suspensión con el poploc

2) Giro totalmente el floodgate hasta el tope (+) para que la suspensión quede totalmente cerrada

3) Giro en dirección contraria un par de vueltas hasta encontrar un punto de rigidez de mi agrado, de forma que la suspensión permita ser comprimida.

Qué logro con esto? Sencillo: tengo 2 niveles de amortiguación; uno completamente suave el cual uso casi todo el tiempo y uno más contenido que evita que se clave la suspensión mientras bajo por escalones en el monte o evita el balanceo innecesarios si en algún raro momento quiero hacer un sprint para rebasar a Guido en el asfalto :P

Como dije antes, el tener la suspensión seteada correctamente me ha salvado de un buen par de estrallones ya que he sabido caer en zurcos o pasar por encima de obstáculos relativamente grandes y por la suspensión recoger a tiempo, así salir airoso en lugar de salir por los aires :P

Qué hubiera pasado si en lugar de una suspensión suave hubiera andado con una excesivamente rígida? Fácilmente ésta en lugar de ceder ante el golpe, sirve de palanca y me voy de boca. Así de sencillo.

También me fue MUY útil haberla calibrado a tiempo para el survivor, porque por estar de prisa, olvidé las guantillas y de no haber tenido una suspensión suave no hubiera podido aguantar esas más de 10 horas que duramos pedaleando.

Igualmente en el paseo a las pirámides. Me fue increíblemente útil al bajar la montaña. Mientras menos vibraciones usted recibe, menos fatiga en las manos, menos calambres y más control tiene. Vale la pena, no? Y más si es gratis :)

Quiero por último recalcar que nada de lo expuesto anteriormente es absoluto: son simplemente puntos de partida ya que hay quienes prefieren su suspensión más rígida que lo promedio, o como yo que para uso general, la prefiere lo más suave posible.

Nuevamente, cualquier duda, opinen/pregunten. Trataré de responder de la mejor forma posible. Es posible que algún detalle se me pasara así que no tengan miedo en aportar alguna experiencia o inquietud. Aquí todos aprendemos de todos.


Aquí pongo algunas fotos que tomé para ilustrar un poco lo antes descrito:

Fotos :)


FAC.- / TBMTB

1 comentario:

Anthony Areche Pappaterra dijo...

Francis excelente aporte y muy bien explicado, te felicito.